Lo que Él quiere lograr en tu vida
16722
post-template-default,single,single-post,postid-16722,single-format-standard,bridge-core-3.0.5,mec-theme-bridge,qi-blocks-1.2.7,qodef-gutenberg--no-touch,qodef-qi--no-touch,qi-addons-for-elementor-1.7.1,qode-page-transition-enabled,ajax_fade,page_not_loaded,,qode-title-hidden,qode_grid_1300,qode-theme-ver-29.1,qode-theme-bridge,wpb-js-composer js-comp-ver-6.9.0,vc_responsive,elementor-default,elementor-kit-14558

Lo que Él quiere lograr en tu vida

Lo que Él quiere hacer en tu vida se manifiesta a través de la obra del Espíritu Santo. ¿Por qué? Porque el Espíritu siempre llevará consigo el poder de la Palabra de Dios, una Palabra que es capaz de llevar a cabo cualquier acción en la tierra. Por eso es importante que reconozcas el papel del Espíritu Santo.

Vamos a ir del Nuevo Testamento para atrás y luego vamos a volver al Génesis en unos minutos. Yo creo que lo que te voy a mostrar te va a ayudar a crecer en tu relación con la persona del Espíritu Santo, porque vas a entender realmente qué es lo que él quiere lograr en tu vida.

Quiero que vayas conmigo al libro de Juan, capítulo 1 esto es cuando el apóstol Juan comienza a introducir y a presentar quién es Jesús y su obra. Recuerda que cada uno de los evangelistas, Mateo, Marcos, Lucas y Juan, comienza cada uno de una manera diferente presentando quién es Jesús, de acuerdo al público al que ellos le van a predicar.

Mateo lo presenta como el hijo del rey, como el rey. Lucas lo presenta como el hijo del hombre. Así que tú vas a ir viendo poco a poco cómo se presentan las diferentes genealogías en uno vemos la genealogía del padre, en otro vemos la genealogía de la madre y todo tiene que ver con con qué o hacia quién está dirigido cada uno de estos libros.

Ahora, cuando vamos a Juan, Juan utiliza una manera muy peculiar de presentar quién es Jesús y la obra redentora a través de lo que es el poder del verbo o de la palabra. Mira lo que dice en el libro de Juan, capítulo 1, el verso 1 al verso 4:

En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. Esto era en el principio con Dios. Todas las cosas por él fueron hechas, y sin Él nada de lo que ha sido hecho fue hecho. En Él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres. La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas no prevalecieron contra ella.’

Cuando nosotros miramos esta descripción, está hablando del poder del Ruac (de la palabra o del verbo), que es una referencia directa a la persona del Espíritu Santo y a la obra del Espíritu Santo. Lo que él viene a hacer en nuestras vidas.

Cuando usted mira el libro de Juan, capítulo 1, está haciendo referencia claramente también al principio de todas las cosas que lo vemos en Génesis, capítulo 1. Como dice el verso 1: ‘En el principio creó Dios los cielos y la tierra. Y la tierra estaba desordenada y vacía, y el espíritu de Jehová (el Ruac Elohim) se movía sobre la faz de las aguas.’ Y comienza a hacer esa descripción de cómo básicamente por causa del poder creativo del Espíritu Santo (de la persona del Espíritu Santo) todo lo que era un caos se convierte en orden.

Y Juan comienza a relacionar la obra que Cristo venía a hacer con la persona del Espíritu Santo haciéndonos referencia a que de la misma manera que en el Antiguo Testamento (en el libro de Génesis) observamos cómo es por el verbo (por el verbo manifestado) todas las cosas se ordenaron, eso es lo que Jesús va a ser a través de la obra del Espíritu Santo.

Ahora dicho eso ¿por qué es tan importante? ¿Por qué es tan importante esta declaración? Nunca podemos desligar a la persona del Espíritu Santo con lo que es el poder de la palabra de Dios: el poder de la palabra de Dios tanto escrita como la palabra hablada.

Cuando usted mira la obra del Espíritu Santo a través de toda la Biblia siempre va a estar el elemento de la palabra de Dios: la palabra de Dios tiene que estar ahí de alguna manera u otra; tiene que estar la palabra inspirada; la palabra que se manifiesta en tu vida; y esa palabra es la que se hace carne y se manifiesta eventualmente.

Recuerdas que cuando el ángel se le apareció a María, el ángel le dice a María: ‘Sabes qué, tranquila, el Espíritu vendrá sobre ti, el Espíritu te va a sobrecoger y tú vas a concebir.’ ¿Qué fue lo que pasó en ese momento? El verbo se hizo carne. ¿Qué fue lo que tuvo que recibir María para quedar embarazada? Una palabra. ¿Cuál fue la declaración de María? ‘No entiendo, pero hágase tu voluntad.’ Hágase.”

Como tú has dicho, por supuesto, estoy parafraseando, porque María preguntó, pero no entendió la contestación que Dios le dio. Yo sé que ella no la entendió porque cuando usted mira la conversación, realmente es muy difícil comprenderla. Y cuando María dice: ‘Hágase como tú has dicho’, lo que está implicando es: ‘Mira, no lo entiendo, pero lo voy a recibir’. Y ella quedó embarazada de la palabra. El Verbo se hizo carne.

Y ese Verbo que se hizo carne en la persona de Jesús fue el mismo verbo, fue la misma palabra que lo resucitó de entre los muertos. Fue lo mismo que pasó con Lázaro, cuando Lázaro está a punto de morir, le llega una noticia a Jesús: ‘Lázaro ha muerto’. Pero él dice: ‘Él no está muerto’. ¿Qué es lo que él manda? La palabra. ¿Y qué hace la palabra? La palabra detiene el tiempo. No cambia instantáneamente lo natural, que es algo que yo quiero que tú entiendas ahora desde ahora, pero la palabra se queda gravitando en el aire hasta que esa Palabra se va a manifestar.

Cuando Jesús llega allí donde Lázaro, lo que hace es llamar una vez más la palabra que ya había sido enviada porque aunque naturalmente Lázaro había muerto, la palabra sí había sido enviada y aquella Palabra no iba a permitir que Lázaro se quedara allí escondido en aquel lugar. Así que Jesús se paró allí y dijo: ‘Lázaro, ven fuera’. Y esa misma palabra fue la que agarró a Lázaro y lo sacó de aquel lugar.

Yo quiero que tú entiendas en el día de hoy que cada Palabra que tú recibes en este lugar algún día se va a manifestar en tu vida. Algún día se va a hacer carne en tu vida, tú cada vez que vienes aquí vienes a quedar embarazado y embarazada del espíritu de Dios y del espíritu de la Palabra. Eso no quiere decir que inmediatamente todo va a pasar, pero esa palabra se va incubando y se va metiendo allá dentro de ti y llega un momento donde tú tienes que encomendarte a esa Palabra. Tiene un momento donde tienes que decir: ‘Voy a dejar mi mente a un lado y voy a creer la palabra punto y se acabó’. Sienta lo que sienta, sienta yo algo o no lo sienta, voy a creer la palabra que se me ha dado.

Yo no sé cuántos podrían estar de acuerdo conmigo en que si tú no hubieras oído esta Palabra hace años atrás probablemente tu forma de ver la pandemia hubiera sido diferente. Los problemas que has vivido en el día de hoy los estuvieras viendo diferente pero la Palabra que habías recibido, que estaba en tu interior, que estaba dentro de ti, que se embarazó en tu espíritu, cuando llega el problema te hace ver las cosas de una forma diferente porque esa Palabra se cumple en tu vida.

Por eso es que cada momento tú y yo tenemos que estar obsesionados por la Palabra de Dios. Por la Palabra de Dios porque esa Palabra a lo mejor no se cumple mañana, pero un día se va a cumplir. A lo mejor no se cumple pasado mañana, pero esa Palabra yo la voy a necesitar y Dios no va a hacer nada aparte o separado de su Palabra punto y se acabó.

2 Comments
  • sadela jose latuff pineda
    Posted at 08:16h, 31 October Reply

    HOY 31 OCTUBRE,,,,,EL RUAH ELOIN ORDENO TODAS LAS COSAS,,,,,,EL PODER DE LA PALABRA,,,,,EL VERVO SE HISO CARNE,,,,MARIA RECIIBIO UNA PALABRA,,,,Y ESA PALABRA SE FUE GESTANDO,,,,,,EN SU VIENTRE,,,,LATUFF SADELA DESDE VENEZUELA….

  • Oswaldo Monier
    Posted at 08:51h, 31 October Reply

    Lléname de Tú Precioso Espíritu Santo y de Tú Palabra AMADO PADRE CELESTIAL
    AMÉN 🙏🙏🙏🙏

Post A Comment