¿Buscas creer o conocerlo más a Él?
16365
post-template-default,single,single-post,postid-16365,single-format-standard,bridge-core-3.0.5,mec-theme-bridge,qi-blocks-1.2.7,qodef-gutenberg--no-touch,qodef-qi--no-touch,qi-addons-for-elementor-1.7.1,qode-page-transition-enabled,ajax_fade,page_not_loaded,,qode-title-hidden,qode_grid_1300,qode-theme-ver-29.1,qode-theme-bridge,wpb-js-composer js-comp-ver-6.9.0,vc_responsive,elementor-default,elementor-kit-14558

¿Buscas creer o conocerlo más a Él?

No basta con creer, nuestro único objetivo cuando aceptamos a Dios en nuestro corazón, es conocerlo por encima de todas las cosas. ¿Cómo puedes creer sin conocer lo que realmente Él quiere enseñarte? El deseo de conocer a Dios realmente nos hace diferentes, nos hace únicos y es la llave para poder cumplir con el propósito que tienes en esta tierra. En este video toco diversos aspectos, pero especialmente, el papel de la serpiente y cómo esta hace lo posible por entrar en tu vida y en tu corazón, fortalecer tu vida en Dios y dejarte proveer y proteger es lo que te salvará.

En los días pasados, escuchaba a la pastora Priscila contar una historia muy interesante. Ella contaba cómo un grupo de estudiantes fue a visitar la famosa casa de John Wesley. John Wesley es uno de los reformadores más importantes, una de las personas más influyentes en lo que conocemos hoy como el movimiento reformador protestante. Fue una de las personas que Dios utilizó para uno de los más grandes avivamientos que se experimentaron en el área de Inglaterra. Es una persona muy importante dentro de nuestra historia como cristianos.

Hay un museo, un lugar donde usted puede ver muchas cosas interesantes de ese tiempo y ese momento histórico de la iglesia, pero una de ellas es su casa, es su hogar. Se cuenta que llevaban a un grupo de estudiantes a este lugar y estaban mirando la sala, el comedor, viendo dónde él vivía. Y cuando entraron a su cuarto, los que estaban allí de repente vieron al lado de su cama dos marcas muy interesantes y preguntaron al que les estaba dirigiendo: “¿Qué son esas dos marcas al lado de la cama?” Y la persona que les estaba dando el tour les dice: “Esas son las rodillas de John Wesley. Se levantaba todos los días, se arrodillaba a orar y a veces pasaba horas y horas y horas orando, al punto tal que quedaron estas dos marcas ahí en este suelo, ahí en la alfombra”. Y esta persona impactó con eso a todos los estudiantes que estaban allí.

Cuando ya iban de regreso la persona que está dirigiendo el tour comienza a contar cuántos estudiantes hay y de repente se dan cuenta de que faltaba uno. Y de repente ahora se encuentra que entra al cuarto y ve a este joven arrodillado en ese mismo lugar donde John Wesley oraba, con sus manos levantadas al cielo diciendo: “Señor, si lo hiciste una vez, vuélvelo a hacer y hazlo conmigo. Si lo hiciste, hazlo otra vez y hazlo conmigo”. El maestro fue y tocó el hombro de esta persona, de este joven, le dijo: “Tenemos que irnos”. Y de sus rodillas se levantó el gran conocido evangelista Billy Graham.

Y creo que definitivamente podemos saber que, de alguna manera u otra, Dios lo hizo otra vez para cambiar la historia. No hace falta mucha gente, lo que hace falta es gente que conozca a Dios como otros no lo han conocido. Yo sé que queremos que el mundo entero sea cambiado y que todo el mundo sea salvo, pero la historia a través de todos los tiempos vemos que se transforma por personas que llegan a tener una relación con Dios que otros no logran tener.

Y no logran tenerla no porque no la puedan tener, es porque simplemente no lo buscan con la misma intensidad que solo algunos a través de la historia se atreven a buscarlo.

Cuando nosotros entendamos en nuestra vida que la mayor vocación de cada uno de nosotros debe ser conocerlo a Él, nuestra vida se transforma para siempre. Cuando yo entiendo que lo más importante en mi vida no es ni aún mi fe, no es si creo en Él o no, que la realidad es conocerle a Él. Que mi fe va a depender de que lo conozca a Él. Si lo conozco puedo tener fe. Si tengo fe y no lo conozco, mi fe no es otra cosa que una simple religión. 

Y religión es otra cosa más qué haré para tratar de darle sentido a mi vida y eventualmente me sentiré insatisfecho, no tendré plenitud, no tendrá sentido lo que hago. Mi razonamiento me llevará a pensar que estoy perdiendo el tiempo porque estoy tratando de hacer algo que solo podré obtener en el momento que lo conozca a Él.

No Comments

Post A Comment