13 Jul Esperar por los demás

Somos responsables de llenar toda la tierra con la predicación de la Palabra no para estar aquí tú y yo como dos, no para quedarnos en este lugar tú y yo hemos vivido mucho, lo que estamos aquí hemos vivido esa protección divina. 

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No hemos tenido vidas perfectas pero podemos disfrutar de la bendición de servirle a Dios, tu vida está más estable, más tranquila y tienes más paz pero la pregunta es ¿Con quién lo estás compartiendo? ¿Con quién te sientas hablar? ¿A quién le predicas? ¿A quién escuchas?

Tu dependencia no puede venir de los cambios del mundo, tiene que venir  de Dios que no importa quien esté en poder puede cambiar tu vida para siempre.

Si nosotros no edificamos nuestra casa con Dios en vano trabajan los que la edifican y ahora nuestra labor es repartir eso a todo el que más podamos pero si tú esperas que el gobierno te dé, que el gobierno te ayude, que el sistema cambie y no cambias tú adentro ¿Qué estás esperando? 

Si aquí nos ponemos a esperar que nos den las cosas, que nos ayuden, que aquí lo otro no hacemos absolutamente nada, si estamos esperando la aprobación de los demás y que cambia aquel y que el otro cambie y que haya alguien más fácil que ayude nada cambia. 

Es el momento donde nosotros tenemos que depender de Dios sobre todas las cosas y sabe que la locura del Evangelio es la que me mantiene cuerdo en tiempos de locura parece una locura lo que estoy diciendo por eso es lo que dice la Palabra del Señor es la locura del Evangelio de creer que Jesucristo es El Señor. 

Es esa locura de saber que mi esperanza está en Dios, que Dios es quien cuida mi vida, que Dios es quien me levanta, esa esperanza de saber que Dios puede transformar todas las cosas en esperanza, de saber que Él va con nosotros y que todo lo que hagamos con Él  podemos tener grandes resultados.