Una Ofrenda de Resurrección 
12926
post-template-default,single,single-post,postid-12926,single-format-standard,bridge-core-3.0.5,mec-theme-bridge,qi-blocks-1.2.7,qodef-gutenberg--no-touch,qodef-qi--no-touch,qi-addons-for-elementor-1.7.0,qode-page-transition-enabled,ajax_fade,page_not_loaded,,qode-title-hidden,qode_grid_1300,qode-theme-ver-29.1,qode-theme-bridge,wpb-js-composer js-comp-ver-6.9.0,vc_responsive,elementor-default,elementor-kit-14558

Una Ofrenda de Resurrección 

En la Biblia hay una ofrenda extravagante, sobrenatural, espectacular, que es la ofrenda de Salomón.  La ofrenda de un hombre rico, de un joven rey, una ofrenda poderosa, grande.  Dice la Biblia que, cuando él iba a entrar como rey, presentó mil toros delante de Dios.  No vayas con dos dracmas cuando puedes dar mil toros.  El presentó mil bueyes.  No vacas, sino bueyes.  Aquello representaba fuerza, son los que siembran la semilla en la vaca.  Y el propósito de aquella ofrenda era una petición: Señor, dame sabiduría.  

La gente próspera no da porque necesite más dinero; la gente próspera sabe que es sabio dar, y que en la dádiva hay sabiduría.  Cuando tú te presentas delante de Dios, tu expectativa no es meramente una multiplicación, aunque Dios lo puede hacer, pero tú te presentas con el mejor sacrificio porque estás en una encrucijada por los próximos años, que si no sabes cómo tienes que operar y si Dios no va contigo, estás seguro que no servirá de nada el camino en el que vas.  

Así que vemos a una mujer necesitada, y a un hombre rico, próspero, millonario, que dice: vengo delante del Señor, y voy a dar lo mejor que tengo.  La necesidad produjo fe en aquella mujer; al mismo tiempo, la necesidad espiritual, emocional, mental que tiene una persona como Salomón, que ofrendó en grande, solo para pedir: Señor, dame sabiduría.  Y tú te quejas de pagar el préstamo estudiantil, de comprar un libro; pero Salomón sabía que de nada servía todo aquello si Dios no iba con él y no le daba sabiduría.  

La sabiduría que tú recibes a través de estos mensajes te ayuda a caminar en la semana, te ayuda a tomar decisiones; aquí Dios te dice qué tienes que hacer.  

Pero hay otra historia de una mujer, que es bien interesante.  

3 Entonces María tomó una libra de perfume de nardo puro, de mucho precio, y ungió los pies de Jesús, y los enjugó con sus cabellos; y la casa se llenó del olor del perfume. 4 Y dijo uno de sus discípulos, Judas Iscariote hijo de Simón, el que le había de entregar: 5 ¿Por qué no fue este perfume vendido por trescientos denarios, y dado a los pobres? 6 Pero dijo esto, no porque se cuidara de los pobres, sino porque era ladrón, y teniendo la bolsa, sustraía de lo que se echaba en ella.”  Juan 12:3-6  

Judas no dijo esto porque quisiera darle tanto a los pobres.  Cada vez que alguien critique a los que dan y a los que tienen, en vez de juzgar a los que dan y a los que tienen, tú lo que tienes es que juzgar al que criticó.  Porque la mayoría de las críticas esconden detrás intenciones incorrectas.  ¿Cómo sabemos que Judas estaba mal?  Por como terminó; ahorcado.  ¿Cómo sabemos que esta no es una pregunta piadosa?  Porque él vendió al Maestro por treinta monedas de plata.  Te vas a dar cuenta que todo el que tiene la actitud de Judas, su vida termina peor que como comenzaron.  La persona que cuestiona la dádiva de otro y al que la recibe… no cuestiones al que están criticando, cuestiona el motivo del que está criticando, el motivo de aquel que está juzgando con un supuesto aspecto de piedad: ¡Qué mucho se podría hacer!  ¡Qué mucho se podría alcanzar!  

7 Entonces Jesús dijo: Déjala; para el día de mi sepultura ha guardado esto. 8 Porque a los pobres siempre los tendréis con vosotros, mas a mí no siempre me tendréis.”  Juan 12:7-8  

Estas son palabras de Jesús.  A los pobres, siempre los vas a tener.  Y tiempo para darle a alguien que necesita, siempre vas a tener.  Siempre va a haber necesidad y para darle a alguien en necesidad siempre tendrás oportunidad, pero para darle al Autor de la vida, no siempre tendrían esa oportunidad.  

La dádiva de fe aprovecha oportunidades que no se vuelven a repetir.  Son momentos que no se vuelven a repetir y que demandan de ti algo que no va a volver a pasar.  Seguirás diezmando y ofrendando, pero hay un momento que no vuelve a ocurrir, y si tú no participas de ese momento, lo pierdes, y ese momento nunca más va a volver.  

La Biblia registra dos momentos en que mujeres ungieron los pies del Maestro.  Hay quien piensa que es el mismo momento, otros no.  Pero en esta historia en particular, hay un detalle que quizás tú nunca habías visto.  Estamos hablando de la fe de dar algo y lo que provocó esa fe.  En la viuda, la necesidad provocó su fe; en la vida de Salomón, él necesitaba dirección para su vida, y dio por encima de sus fuerzas.  Pero veamos los primeros versos de este capítulo.  

Seis días antes de la pascua, vino Jesús a Betania, donde estaba Lázaro, el que había estado muerto, y a quien había resucitado de los muertos. 2 Y le hicieron allí una cena; Marta servía, y Lázaro era uno de los que estaban sentados a la mesa con él.”  Juan 12:1-2  

Ese aceite se usaba para cuando tú tenías a alguien muerto; con eso, guardabas su cuerpo, lo ungías.  Pero ya su hermano no estaba muerto, no había necesidad de aquello que se había guardado y que se iba a usar para ungir el cuerpo para que permaneciera lo mejor posible, cuidado.  Probablemente, Lázaro hedía luego de cuatro días porque habían guardado aquel pote de alabastro.  Imagina la escena.  María y Marta en aquel lugar.  María sentada a los pies de Cristo, ella volviendo a unos días atrás, pensando: mi hermano estaba muerto, y míralo aquí sentado.  Pudo haber estado pensando: ¿qué sería de mí, si mi hermano estuviera muerto hoy?  Probablemente, era el proveedor en ese momento.  Y María se sentó a mirar aquel cuadro: Jesús, y su hermano resucitado.  Y aquel agradecimiento le produjo fe para dar lo que había guardado durante todo un año, sabiendo que no lo iba a necesitar de inmediato, que la resurrección había llegado a su vida.  

¿Cuándo fue la última vez que tú te sentaste y contemplaste todo lo que Dios ha hecho en tu vida?  ¿Cuándo fue la última vez que miraste a tu alrededor y realizaste todo lo que Dios te ha dado y todo lo que Él ha hecho por ti?  ¿Cuándo fue la última vez que te detuviste a dar gracias por todo lo que Dios ha hecho por ti?  ¿O es solo tu necesidad lo más que apremia en tu vida?  La fe más grande para dar por encima de tus fuerzas es cuando tú te sientas a contemplar y te das cuenta que si Jesús no hubiera llegado a tu vida a tiempo, ¿dónde estarías tú hoy?  Todo lo que tienes, lo que eres, donde estás, es por la gracia divina, por el poder de Dios.  

Es la generosidad la que te produce a ti creer que todo lo que has guardado por un año, ya no lo vas a necesitar.  Hay quien se iba a divorciar, quien perdió muchas cosas en el pasado, pero no han necesitado hacer mucho que pensaron que tendrían que hacer porque hoy Dios los ha resucitado, los ha levantado, los ha cuidado, los ha guardado, los ha prosperado.  

Cuando tú contemplas tu vida por un momento, no te queda más remedio que dar todo lo que tienes al Señor.  Porque ¿dónde estarías tú hoy, si Él no hubiera llegado a tu vida?  Esa es la verdadera generosidad de un cristiano.  El ateo puede ser generoso, pero nunca dadivoso porque la dádiva la produce el saber que hay un Dios que suple tus necesidades, que te da sabiduría y te abre caminos, un Dios que, sin Él, no estarías donde estás hoy.  

La única manera que puedes volverte una persona realmente dadivosa es cuando activas tu fe en medio de tu generosidad y comienzas a creerle al Dios Todopoderoso.  

Fe es dar más allá de tus fuerzas.  Por eso es que tienes que creerle a Dios.  ¿Por qué tú no te rindes con la gente, con tus hijos?  No es meramente porque los amas, sino también porque tú le sirves a un Dios real, verdadero; así que, tú sigues amando, dando, haciendo.  Porque hay un Dios real que tú sabes que no es hombre para que mienta ni hijo de hombre para que se arrepienta.  Dios no se va a olvidar de la obra de tus manos.  Lo que Él prometió, Él lo va a cumplir.  Cuando tú haces lo que haces por Dios, siempre tienes recompensa.  Que nunca nadie mate el dador que hay en ti.  Atrévete a dar, a hacer más allá de tus fuerzas, y cree que la recompensa viene del Dios Todopoderoso, en el nombre de Jesús. 

7 Comments
  • Wiliam Antonio Chacon Vargas
    Posted at 12:21h, 21 April Reply

    Amén y bendiciones

  • Jhon Mario Rojas
    Posted at 14:08h, 21 April Reply

    Amén y amén

  • Nelson García
    Posted at 19:13h, 21 April Reply

    Amén yo lo creo Mi Dios

  • Martha Lucia Hernández
    Posted at 19:39h, 21 April Reply

    Amen gracias por este mensajes Toda la Gloria sea para Nuestro Padre Celestial
    AMEN AMEN

  • MADELINE GONZALEZ
    Posted at 19:45h, 21 April Reply

    poderosa palabra…Dios es bueno

  • Liseth Trujillo
    Posted at 23:39h, 21 April Reply

    Amén y amén la recompensa mi recompensa y la de mi Familia viene del Dios todopoderoso en el nombre poderoso del Señor Jesús amén y amén🙏🏽🙏🏽🙏🏽🙌🏼🙌🏼🙌🏼❤️❤️❤️

  • Juan Blas Monroy Rios
    Posted at 03:31h, 22 April Reply

    Amén amén amén Gloria a Dios,yo no soy de las personas que guardan o acumulan riquezas,Dios conoce todo de mi y en su palabra él me dice que no sepa tu mano derecha lo que hace la izquierda,tengo varios años viviendo “hoy” por que nadie sabe si habrá un mañana solo Dios y Dios conoce mi corazón lo que he hecho y lo que aún no hago y que haré si él tiene planeado que viva más tiempo, así que mi Amado hermano OtonielFont yo puedo tener toda la intención de dar una ofrenda excelente,grande no para que las personas vean yo lo que hago lo hago para Dios, quisiera hacer demasiadas cosas para mí prójimo,pero si no tengo para dar una ofrenda monetaria hay muchas formas de ofrendar no precisamente con dineros,que si los tuviera Dios sabe él me conoce él puso en mi corazón y su Espíritu Santo me ha mostrado que nada es mío que todo es prestado que él pone riquezas y bienes,para ser de bendición al prójimo así que no acostumbro a guardar nada y Dios asombrosamente me multiplica,él nunca me ha dejado ni me dejará yo tengo una fe que usted no se imagina ahora mismo le digo que agradezco a Dios por la Gran bendición que ha enviado a mi vida para un hermano que no quiero decir su nombre se que ya tengo esa bendición a un que ahorita no la tenga en mis manos pero tengo la certeza de que ya Dios ha abierto las ventanas de los cielos como otras tantas veces y. lo haré amén en el nombre de Jesús agradezco a Dios siempre por todo lo que me ha dado,lo que me está dando y lo que me dará,así que pronto usted verá la mano Poderosa de Dios en mi vida, amén.
    Dios le Bendiga Amado hermano OtonielFont con ricas bendiciones Espirituales le mando un fuerte abrazo fraternal en Cristo Jesús amén.

Post A Comment