El Milagro de la Salvación
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El Milagro de la Salvación

Dios es un Dios de milagros, y todavía al día de hoy hace grandes cosas.  Dios puede sanar, libertar; creemos en el poder transformador y en el poder sanador de Dios.  Pero, a veces, los cristianos y la sociedad solo dependemos de Dios para milagros externos.  Nos acercamos a Él pidiendo un milagro de sanidad; que el cáncer desaparezca, que la diabetes se vaya, que el matrimonio sea restaurado, un milagro financiero.  Y no debemos sentirnos mal en pedir; Dios quiere que sus hijos experimenten la mayor plenitud y bendición en sus vidas.  Pero esa obsesión que tenemos por esos milagros externos, han hecho que perdamos de vista el milagro más importante, que es no tan solo la salvación de una persona, sino la transformación total del corazón, de la actitud, del comportamiento de un individuo.  

Toma todo el poder de Dios para que alguien sea cambiado y transformado, para que una persona cambie su corazón y comience a vivir para Él.  

Hemos comenzado una iniciativa sumamente poderosa en nuestra iglesia, y queremos incluirte, que seas parte; que tu corazón comience a arder como nunca antes y que comiences a experimentar una transformación sobrenatural en tu vida.  

26 Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne.”  Ezequiel 36:26  

En un momento crucial del pueblo de Israel, Dios les dice: Te voy a dar un nuevo corazón, el regalo de la transformación.  Un corazón transformado hace que toda circunstancia y todo problema, parezca como nada.  Un corazón transformado tiene la paciencia suficiente para permanecer en fe hasta que Dios haga el milagro de sanidad, el milagro económico.  Un corazón de carne, sensible a las cosas de Dios, hace que una persona pueda pasar aun por las peores dificultades, y mantenerse convencido, lleno de esperanza de que Dios hará un milagro.  Un corazón transformado, cuando recibe ofensas, rechazo, odio, no se corrompe, no toma venganza, sino que permanece fiel a Dios, tratando a los demás como Dios quiere que lo hagamos.  Esa persona tiene que tener una mejor calidad de vida.  No solo tiene la esperanza del futuro, de encontrarse un día cara a cara con el Señor, sino que vive una vida plena, de satisfacción y bendición.  

De alguna manera u otra, todos tratamos de alcanzar una vida como esa.  Pensamos que la manera de hacerlo es pidiendo un milagro económico, financiero, de salud; pensamos que teniendo una casa, salud, entonces pudiéramos hacer otras cosas, disfrutar; y eso tiene cierta verdad, pero ese disfrute es temporero.  Aun el disfrute de una sanidad es temporero porque no quiere decir que no vayas a enfrentar problemas en el mañana; pero una persona que aún tiene una enfermedad física, si su corazón es transformado, su espíritu se vuelve alegre, se mantiene en fe, con la paciencia necesaria hasta que se manifieste el milagro en su vida.  

Dios le dio grandes milagros al pueblo de Israel; la tierra prometida, agua en el desierto, maná; y con todo y eso, el corazón estaba dañado y corrompido, iban detrás de otros dioses; así que los milagros externos Dios los hizo y los hace, pero el milagro de la transformación del corazón es el que hace que permanezcamos en ese estado de plenitud donde podamos disfrutar de una perfecta relación con Dios, y al mismo tiempo tener la esperanza y la expectativa para creer por los otros milagros.  

Accede unnuevocorazon.com.  Allí puedes enviarnos tu información para ayudarte en este caminar, si hoy decides entregarle tu vida al Señor, o si ya lo habías hecho y hoy reconoces que necesitas reconciliarte con Él.  Hay otro espacio también en unnuevocorazon.com para aquellos que ya le sirven al Señor, pero tienen familiares y seres queridos que no conocen a Cristo.  Queremos ayudarte a orar por ellos, creyendo por el milagro de la salvación para los tuyos.  Cientos nos han enviado ya sus nombres; únete a nosotros en esta oración.  

En el capítulo que estamos viendo en Ezequiel, vemos el corazón de Dios.  A la vez, vemos un lenguaje fuerte; se estaba tratando de corregir al pueblo, y no se puede corregir de manera simple.  Pero el contexto de lo que Dios quería hacer y la historia del pueblo de Israel, es muy parecida a la de muchos de nosotros.  

Este capítulo se llama “La restauración futura de Israel”, y es parte de la profecía de que Dios restauraría a Israel.  Pero en esta ocasión, dentro de lo que es la restauración de Israel, el enfoque de Dios es la transformación interna del corazón del pueblo.  A través de la historia, el pueblo de Israel tomó única y exclusivamente su proceso de transformación o de estar con Dios, como uno basado en la posesión de un pedazo de tierra.  Por lo general, el pueblo de Israel fue exiliado, estuvo bajo otros reinados, bajo otros gobiernos y civilizaciones; aspiraban únicamente a la transformación donde Dios los sacaría de aquellos lugares de esclavitud y los llevaría a la tierra prometida.  Pero para ellos, era una transformación o un proceso físico más que nada.  En múltiples ocasiones, el pueblo de Dios perdió sus tierras y las recuperaba; fueron esclavos de los egipcios, de los babilónicos, de los romanos; y la esperanza de ellos era la transformación de su nación y regresar a un lugar en específico en la tierra.  Definitivamente, esa era parte de la promesa de Dios, pero Él quería darles algo más.  

Dios sabía que seguir dándoles la tierra, devolvérselas, no resolvía el problema.  Y la promesa que Dios quiere hacer es más grande.  Les estaba diciendo: El problema de ustedes no es uno terrenal, no es un problema de tierra, uno natural, sino espiritual; es una rebeldía que tienen en el corazón, que hace que todo lo que yo les dé lo pierdan.  

Dios hace el milagro; te sana, te liberta, te transforma, te puede dar finanzas; pero de qué le sirve darte un milagro económico si tu corazón todavía está atado por las deudas, si no tienes fe.  Sería como ponerle un parcho a una situación.  Dios estaba diciendo, a través del profeta: Lo que quiero hacer con ustedes es diferente, especial.  Todavía la promesa de la tierra estaba, pero Dios haría algo más poderoso.  

En los versos siguientes, Dios le promete al pueblo hacer tres cosas por ellos:  

  1. Limpiarlos.  Dios ha prometido limpiar tu vida.  Estás sumergido en culpabilidad y condenación por las cosas pasadas, por lo que hiciste.  No puedes olvidar y las emociones que traen consigo esos recuerdos no te dejan moverte al futuro.  Te desesperas, te pones ansioso por tu situación.  Tratas de llenar tu mente, de entretenerte, pero vuelves al mismo círculo vicioso.  Pero Dios te dice: Yo te voy a limpiar; yo voy a hacer que, aunque tengas memoria de esas cosas, no te afecten emocional y espiritualmente.  
  2. Transformarlos.  Les daría un corazón nuevo, un nuevo espíritu, haría una obra de transformación.  La gente ni te va a reconocer.  Toma todo el poder de Dios para transformar tu vida.  Has estado tratando de cambiar, de mejorar; tienes el buen deseo, pero has estado tratando de hacer de afuera hacia adentro.  Esto es obra del poder del Espíritu Santo; es cuando Él comienza a obrar en tu vida, cuando Él comienza a meterse dentro de ti, a cambiar tu corazón, que eventualmente tu vida es completamente transformada.  Cuando llegan situaciones, reaccionas de una manera diferente a como lo hacías antes, tus pensamientos son cambiados, renovados; eres una persona totalmente distinta.  Toma todo el poder de Dios para cambiar ese corazón, para tornarlo en uno sensible.  
  3. Poseerlos.  Dios les haría posesión suya.  Serían posesión de Dios.  Dios habitaría en ellos, sería parte de ellos, estaría en su interior, sería el dueño de sus vidas, Él iba a poseer su corazón.  

¿No te gustaría eso?  ¿No te gustaría que Dios sea el dueño de tu vida, de tu corazón?  ¿No te gustaría que Él transforme todo tu ser y posea cada rincón de ti?  Te invitamos a tomar hoy la mejor decisión de toda tu vida: Permitirle al poder transformador de Dios obrar en ti de manera sobrenatural y que cambie tu vida para siempre.  Accede unnuevocorazon.com ya sea para entregarle tu vida al Señor, o para enviarnos los nombres de tus familiares para oración por salvación.  Únete a esta iniciativa.  Queremos orar contigo. 

6 Comments
  • Diego Fabián Silva Murcia
    Posted at 12:38h, 30 March Reply

    Amen Gloria a Dios.

  • Alicia Farías González
    Posted at 13:10h, 30 March Reply

    Amén! Gloria a Dios!! Bendiciones Pastor,para su familia, Iglesia y todos sus ministerios!! gracias por esta Palabra de poder,que es de transformación para nuestras vidas.

  • Carla Rocío Girón Guinto
    Posted at 14:08h, 31 March Reply

    Amén mi familia será bendecida y Gustavo y su familia.

  • Nereida Martinez
    Posted at 16:10h, 31 March Reply

    Amen, hermosa palabra. Podo oración por depresion.?????

  • Niger Alfredo Gomez Gordillo
    Posted at 18:35h, 02 April Reply

    Amen,recibo esta preciosa palabra,mi hogar y mi familia en el nombre de Jesús y su preciosa sangre,Gracias pastor por tan hermosa palabra?

  • Carla Rocío Girón Guinto
    Posted at 19:09h, 02 April Reply

    Amén… Dios has un milagro de salvación en mi vida.

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