04 Nov No os afanéis

Es necesario que aprendas a administrar tus finanzas correctamente, que aprendas a diezmar y ofrendar, y que hagas espacio para eso. Debes tener margen en tu vida para honrar a Dios en todas las cosas. La gente no se da cuenta de que nuestra dádiva generosa hacia Dios es una de las cosas que más nos acerca a Él. La fidelidad no tiene que ver únicamente con la buena administración que trae resultados naturales.

Por ejemplo, mira lo que dice Mateo, capítulo 6. La Biblia dice en el libro de Mateo, capítulo 6, verso 25: “Por tanto, os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber, ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido.Mira las aves del cielo, que no siembran ni siegan ni recogen en granero, y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas? Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo. ¿Y por el vestido, por qué os afanáis? Mirad los lirios del campo, cómo crecen; no trabajan ni hilan.

Mas os digo que ni a un Salomón, con toda su gloria, se vistió así como uno de ellos. Y si la hierba del campo, que hoy es y mañana se echa en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más a vosotros, hombres de poca fe? No os afanéis, pues, diciendo: ‘¿Qué comeremos? ¿O qué beberemos? ¿O qué vestiremos?’ Porque los gentiles buscan todas estas cosas, pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas. Más buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os vendrán por añadidura”.

Te traigo este verso de muchos que te pudiera mostrar. Quiero terminar dejándote saber que es necesario que aprendas a administrar tus finanzas correctamente. Debes aprender a diezmar y ofrendar, y hacer espacio para eso. 

La gente no se da cuenta de que nuestra dádiva generosa hacia Dios es una de las cosas que más nos acerca a Él. La Biblia dice en el libro de Efesios claramente que tú y yo nos hemos acercado a Dios por causa de la ofrenda generosa de Él, de su sacrificio.

Cuando una persona hace espacio en su vida y en sus finanzas, y administra correctamente, triunfa en sus finanzas. Pero, además, tiene tres grandes recompensas que el mundo no tiene. Aquí está la diferencia entre un buen administrador y uno fiel.

Uno: Dios lo promueve con mayores riquezas, en todo el sentido de la palabra. Cuando uno administra correctamente su tiempo, te sobra tiempo. Cuando administras bien tus talentos, Dios te da más talento; te da más favor y gracia. Cuando administras correctamente las finanzas y te vuelves generoso, el diezmo y las ofrendas son de las primeras cosas que tú puedes pedirle a Dios. Hermanos, esto trae recompensas, más oportunidades y mayor bendición. La Biblia lo dice claramente; lo leímos en los versos de Lucas.

Número dos: Cuando una persona es fiel administrando, llega el gozo a tu vida. La Biblia dice: “Bien, buen siervo y fiel; en lo mucho te pondré; entra en el gozo de tu Señor”. La Biblia dice que “la bendición de Jehová es la que enriquece y no añade tristeza con ella”. Es verdad que cuando ves buenos administradores afuera que tienen grandes riquezas, no tienen gozo. 

No disfrutan de nada. Hemos comprado la mentira de que para prosperar hay que sacrificar un montón de cosas, que hay que hacer muchos esfuerzos. Pero Dios no te llamó a sacrificar tu familia, tu cuerpo, o tus relaciones para tener dinero. Si eso fuera la verdad, Dios dejaría de ser Dios. 

Él ha prometido prosperarte y bendecirte, y la Biblia dice que “la bendición de Jehová es la que enriquece y no añade tristeza con ella”. Dios te puede prosperar, te puede bendecir, porque Él es quien te recompensa y te da gozo; y te dice: “Disfrútalo, disfruta del bien de tu trabajo. Disfruta de lo que tienes”. Puedes tener paz y tranquilidad; eso es lo que Él dice.

Número tres: Un administrador fiel puede tener algo por seguro: la ansiedad desaparece de tu vida. Cuando aprendes a administrar correctamente, sabes que Dios suple todas tus necesidades. Cuando eres mayordomo fiel y honras a Dios con tu mayordomía y con tu fidelidad, lo otro que desaparece de tu vida es la ansiedad. Sabes que va a aparecer lo que necesitas, cuando lo necesitas. Dios va a suplir, las cosas van a ser añadidas, y Él lo va a traer. Ya no tienes que estar preocupado ni desesperado; la ansiedad desaparece de ti.

Mi oración en el día de hoy es que tú, cuando salgas de aquí, decidas ser un buen mayordomo.