01 Nov ¿Administras bien?
En estos días, me mandaron un video de un pastor orando por una dama para que rebajara en el altar. Lo vamos a usar en Pura Palabra en los próximos días. Yo quisiera orar para que se quite el peso extra que tengo, pero no funciona si no has sacado primero la comida de adentro. Si lo que te controla es tu vientre y tu mente, ¿para qué?
Póngase a pensar en todos los muchachitos, los jovencitos que terminan en la calle. Muchos dirán: “Pastor, pero es que no se puede controlar”. Entonces, ¿qué hago? ¿Los encierro? Yo soy el que los llevo a la policía y los encierro allí. Pero hay cosas que para nosotros fueron un shock cuando nos mudamos a Estados Unidos.
Mi esposa y yo, hace 20 años, fuimos a buscar una casa y todavía no teníamos hijos. Para mí, era sorprendente que en todos los modelos de casa en Estados Unidos, el master room está en un lado y los cuartos de los hijos, al otro. La mente del americano es que no quiere que sus hijos lo molesten cuando entran y salen. Yo no podía entender eso. En mi caso, el master room tiene que estar en la puerta de la escalera, donde cada paso lo oiga.
Si te vas a tirar por la ventana, son 20 pisos si no están clausurados, y lo que tienes es una ventanita del baño para que te entre el tragaluz. No por ahí vas a salir. Yo no podía entender eso. Son mis hijas, y nadie es responsable. Tú eres responsable del dinero que Dios te da, del carro que tienes, de la casa que tienes. Todos los que estamos aquí somos responsables de Puerto Rico. No es el gobierno; somos nosotros. No es el gobierno el que tiene que hacer; somos tú y yo los que tenemos. Dios nos lo entregó a nosotros.
¿Qué vamos a hacer? Como administradores, sabemos que tenemos que rendir cuentas. Creo que a la iglesia se le ha olvidado eso. Un día, te vas a parar delante del Señor. Primero, quiero que entiendas que, como dice el verso que leímos ahorita en Lucas, cuando el Señor venga, va a poner sobre las manos de aquellos que han sido fieles todas las cosas.
Pero al que es malo, Dios viene primero a pedir cuentas. Un día, tú te tienes que parar delante del Señor y decirle: “Señor, buen siervo y fiel; en lo poco fuiste fiel, en lo mucho te voy a poner”. No podrás decirle al Señor: “Señor, pero me hiciste de cinco pies. Era suficiente”. ¿Qué hiciste con los cinco pies? “Señor, si me hubieras hecho de seis pies, yo hubiera estado jugando baloncesto”. Yo no te quería jugando baloncesto; hubiera sido demasiado bueno.
Deja eso. Pero tampoco sirvo para el voleibol. ¿Qué es lo que te queda? Predica. Yo no podré decirle al Señor: “Oye, Señor, ¿qué hiciste? No me diste más”. No, Señor. La pregunta no es cuánto yo te di o cuánto tú querías que yo te diera. Es: ¿qué hiciste con lo que yo te di? ¿Cómo me honraste a mí como administrador de lo que yo te di?
Todos los que estamos aquí tenemos que dar cuenta todos los días. Algún día, nos vamos a tener que parar delante de Él y decirle: “Señor, con todo lo que pusiste en mi mano”. Esto, hermano, usted y yo tenemos que administrar las cosas correctas. Tenemos que dejar el desperdicio, el malgasto, y dejar de hacer las cosas incorrectas a nuestro alrededor.
Cuando una persona comienza a administrar correctamente, varias cosas comienzan a ocurrir en su vida. Anótalas rápidamente porque tengo que orar. Número uno: un buen administrador se libra de montones de problemas. Hay un montón de problemas de los que tú estás tratando de orar para que se vayan, y solo se van si tú administras bien las cosas.
Hay gente que quiere orar para salir de las deudas, cuando lo que hace falta es tener un presupuesto, tener disciplina, controlarte y no gastar de más. Hacer las cosas correctas. Dios puede milagrosamente ayudarte, sí; Dios puede darte favor y gracias. Pero hay una parte que tú tienes que hacer.
¿Por qué Dios te va a sacar de las deudas económicas si la deuda no se ha salido de tu corazón todavía? Lo primero que tú piensas siempre es en conseguir un carro nuevo prestado. ¿Cómo Dios te va a sacar a ti de las deudas si las deudas no se han salido de tu corazón?
En estos días, me mandaron un video de un pastor orando por una dama para que rebajara en el altar. Lo vamos a usar en Pura Palabra en los próximos días, y yo quisiera orar para que se quite el peso extra que tengo. Pero no funciona si tú no has sacado primero la comida de adentro.
Si lo que te controla es tu vientre y tu mente, ¿para qué? Te puedes matar en el gimnasio, pero si eso está dentro de tu corazón, ¿de qué te sirve? Tienes que comenzar a arreglar todas las cosas. Hay un montón de circunstancias de las que tú te librarías, sí, y solo sí administras correctamente tu vida y honras a Dios.
Aura Virginia Carreño Díaz
Posted at 07:58h, 01 NovemberExactly 👍🙏🙏🙏🤗
Gabriela Alarcón
Posted at 11:48h, 01 NovemberExcelente mensaje!! Bendiciones
Wiliam Antonio Chacon Vargas
Posted at 17:02h, 01 NovemberAmén gracias por está palabra muchas bendiciones.
marttha
Posted at 18:09h, 01 NovemberAmen toda Gloria y Honrra es para ti mi Rey
Oswaldo Monier
Posted at 09:04h, 02 NovemberLléname De Discernimiento Y Sabiduría Para Saber Administrar Mejor Mi Vida AMADO PADRE CELESTIAL
AMÉN 🙏🙏🙏