02 Oct ¿Cuántos versos sabes?

Pero el demonio se va cantando, y puedes ir a los congresos que te dé la gana, y puedes ir a los lugares que tú quieras; es la palabra que te sabes, es la palabra que está dentro de ti. Y si Jesús, todos sus momentos importantes fueron marcados por la palabra, ¿cómo un cristiano me va a decir a mí que no sabe la Biblia? No hay confusión cuando fue a resucitar, y después de su resurrección, ¿qué hizo Jesús? Citó las Escrituras. Pero si yo hago una encuesta aquí hoy, ¿cuántos versos tú sabes? ¿Cuánta Escritura tú sabes? ¿Cuántas Escrituras tú citas todos los días en tu vida? Pero todas las canciones nuevas te las sabes.

Pero el demonio se va cantando, y puedes ir a los congresos que te dé la gana, y puedes ir a los lugares que tú quieras; es la Palabra que te sabes, es la Palabra que está dentro de ti. Y si Jesús, todos sus momentos importantes fueron marcados por la Palabra, ¿cómo un cristiano me va a decir a mí que no sabe la Biblia, que no ama la Palabra, que no estudia la Palabra, que no lee la Palabra? Por eso es que tenemos tanta confusión en nuestra vida, por eso es que no tenemos identidad, por eso es que vivimos tan fluctuantes en este mundo, porque no sabemos lo que dice la palabra de Dios. No, ¿qué dice esta Escritura de nosotros?

Yo vengo a decirte en el día de hoy: si tú quieres tener éxito en tu vida como creyente y como cristiano, y ser un verdadero discípulo de Jesús, tienes que aprender a amar la palabra, tienes que aprender a amar esta palabra, vivirla 24 horas al día, vivir por ella. Punto. No hay otra cosa, no hay otra cosa. Lo que pasa es que esto no es lo que quizás en algunos lugares les va a agradar. Hay gente que quiere mejor un mensaje como el que yo te prediqué en el pasado, y que venga aquí y que me vista de muñeco todos los días. ¿Por qué? Porque te gusta, porque es diferente, y muñeco soy yo sin muñeco. Pero, oiga bien, la realidad es que cuando tú vas a luchar en tu vida espiritual, tú no puedes decir “como dijo el pastor aquel día con el muñeco”. No, no, eso no; tú lo que tienes que citar es lo que dice la palabra. No hay más nada, es la palabra, es la palabra.

¿Cómo resuelves problemas en el matrimonio? Con la Palabra. ¿Cómo resuelves problemas con tus hijos? Con la Palabra. Es la Palabra, punto y se acabó. Cuando nosotros entendamos eso como discípulos, vamos a crecer.

¿Por qué es tan importante la palabra de Dios? Varias cosas para orar muy rápidamente. Número uno: la Palabra escrita, esta Palabra escrita evita toda confusión, evita toda confusión. La tentación de Eva vino porque alguien le interpretó lo que Dios dijo: “¿Con que Dios os ha dicho que si comes del árbol vas a ser igual a Él?”. ¿Con que Dios os ha dicho? ¿Qué pasó? ¿Qué Eva tenía que hacer? Eva tenía que ir donde Adán, porque Adán fue el que recibió la palabra en aquel momento, pero Eva no fue donde el que recibió la Palabra; Eva simplemente aceptó la interpretación de la serpiente. Y hay gente que siempre está confundida en su vida porque está aceptando la interpretación de la serpiente para probar cosas que Dios no quiere que tú pruebes. Ella ya conocía el bien, así que lo único que ella iba a conocer era el mal.

¿Cómo vas a desear conocer el mal? Ah, porque te promete que vas a ser igual a Dios. Quiere decir que Dios nunca le iba a dar el conocimiento a ella del mal. No, yo creo que Dios le iba a dar el conocimiento del mal, lo que pasa es que se lo iba a dar en el momento que ella lo pudiera entender. Tú no puedes mantener a todos tus hijos todo tu tiempo inocentes, pero tienes que cuidar cuándo los expones al mundo porque tienes que estar seguro de que pueden manejar el mal que el mundo tiene. Por eso es que no es la universidad, y no es la escuela, y no es el gobierno los que deben enseñar a tus hijos. Los hijos tuyos no son del Estado; el Estado y la nación quieren gobernar y cuidar de nuestros hijos. Oiga bien, esos son tus hijos. Yo les enseño cuando yo quiero, cuando yo creo, no por un currículo, no porque aquel cree, no porque el otro, y tú tienes que pararte firme porque tus hijos te pertenecen a ti, no le pertenecen al gobierno de Puerto Rico ni al sistema de educación.