Tus dones para Dios
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Tus dones para Dios

En el video anterior hablábamos de la misión de cada uno y lo importante que es dedicarse a cumplirla. Hoy quiero enseñarte cómo puedes hacer que tus dones, sin importar cuáles sean, trabajen como instrumentos de la gloria de Dios en la Tierra.

Una mujer desgreñada, uf. Así que, caballeros, pague bien para que, cuando su mujer llegue, usted llegue a su casa, su mujer esté arreglada, peinada, y usted diga: “Así son los ángeles en el cielo.” Qué cosa, si tú eres peluquero, estilista, barbero, cada vez que tú arreglas a una mujer, ¡oh!, el marido ve el cielo y la tierra porque una mujer está desgreñada. Así que, caballero, pague bien para que, cuando su mujer llegue, usted llegue a su casa, su mujer esté arreglada, peinada, y usted diga: “Así son los ángeles en el cielo.” Qué cosa con lo que usted hace.

Porque hoy ese ejemplo podría dar mucho. Si usted es contable y arregla las finanzas de alguien, ¿usted sabe cómo le puede cambiar la vida a una persona si la persona paga sus impuestos correctamente? Los negocios en Puerto Rico y en el mundo entero, una de las razones por las que fracasan es porque no saben pagar los impuestos, y eventualmente un lugar como el SERC termina siendo un problema. Y un contable que arregla las finanzas de una persona, un abogado que previene que alguien vaya a corte, un pastor que, cuando te predica, el matrimonio se restaura, que previene el divorcio, el suicidio, eso es traer el cielo a la tierra.

Hágalo con excelencia. Usted hace su parte, yo hago la mía. Una persona como Carlos, que invierte en la bolsa de valores, que ayuda a que el dinero de alguien trabaje para ellos, no ellos para el dinero. Aquí el dentista, cada vez que arregla una muela, una sonrisa… Póngase a pensar, todo lo que usted hace contribuye, y cada vez que usted está haciendo eso, cada vez que usted está haciendo eso, haga discípulos, ministre a alguien, gane a alguien para el Señor. Dígale lo que estamos predicando aquí en la serie de mensajes, déjele saber, haga una oración por ellos, déjele saber.

Ningún empresario aquí… Oiga bien, y voy a lanzar un reto: usted tiene una empresa, en sus tarjetas de presentación tiene que haber un verso bíblico. Usted hace camisetas para sus empleados, tienen que tener un verso bíblico. Algo tiene que decir Cristo por algún sitio. Usted tiene un restaurante, la servilleta con la que la gente se limpia, imprima algo que diga algo del Señor. Donde quiera que usted vaya, usted y yo estamos aquí para hacer discípulos. Esa es nuestra misión. Cuando nosotros entendamos eso, vamos a mantener la unidad, y ahí es que el mundo lo va a conocer a Él.

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