26 Jan ¿Cuánto estás dispuesto a dar por lo que buscas?

Quiero hacer una aclaración y detesto hacer aclaraciones, pero en el mundo en que vivimos tenemos que hacerlas, ¿verdad? Porque todos lo van a sacar de contexto. Y Oprah Winfrey, al igual que muchas personas que tienen éxito, la iglesia o ciertos sectores de la iglesia no quieren aceptar el éxito que han tenido. Y lamentablemente, eh, también los critican por quizás tener ciertas posturas. Oprah Winfrey ha sido criticada por cierto sector de la iglesia por ciertas ideas que tiene, ciertos ideales que ha tenido a través de los tiempos, eh. Y profesa ser cristiana y, bueno, hay un grupo de personas que dice: «¿Cómo se puede ser cristiana y creer en estas cosas y demás?». Yo no estoy aquí hoy juzgando su moralidad, si es cristiana o no lo es. Eso es algo que tiene que ver con Dios. No estoy mirando hoy aquí de ninguna manera, eh, verdad, su vida moral. Pero no podemos de ninguna forma negar que ha tenido éxito y yo creo que tenemos que tener dos cosas claras antes de yo ver la entrevista y por qué te la traigo.

Número uno: yo creo que, como creyentes, podemos ser sabios de celebrar el éxito de una persona, aunque su vida moral o espiritual o sus pensamientos no estén totalmente de acuerdo con nosotros. Ahí es donde vemos la gracia de Dios, que hace que el sol salga para buenos y para malos. Y aquel que aprovecha la gracia y el talento de Dios sobre su vida puede superar cualquier circunstancia. De la misma manera que, eh, ella, hay mucha gente que ha tenido grandes éxitos en la vida y que son un gran testimonio de cómo superar los problemas, las dificultades y poder levantarse a pesar de las situaciones difíciles. En Puerto Rico tenemos una persona muy conocida en el día de hoy, como Bad Bunny, que yo creo que es una historia de éxito. Le guste a la gente o no, me agrade a mí o no su estilo, lo que dice, lo que hace. Es verdad que tenemos que saber que hay un joven que tuvo una oportunidad, salió de Vega Baja y llegó a ser lo que es en el día de hoy, tan sencillo como eso. Y uno no puede tener envidia ni criticar a medio mundo. Yo creo que podemos celebrar el éxito de una persona y aprender de los éxitos de cierta gente que nos dan de alguna forma esperanza naturalmente.

Número dos: hay que aclarar que éxito no es igual a ser un líder moral y espiritual. Tenemos que tener esto bien claro. No podemos permitir que el éxito de una persona sea lo que haga que ellos sean una influencia sobre nuestra vida. Una cosa es ver el éxito y otra cosa es saber que no deben ser influencia en mi vida, porque éxito no es igual a liderazgo moral, a liderazgo espiritual. Y eso tenemos que nosotros tenerlo claro. Es muy triste que la gente de éxito son las que el mundo los pone a liderar nuestros países, sin darnos cuenta de que éxito no te da la capacidad de ser un verdadero líder para llevar una nación al lugar que debería llevarlo. Pero tampoco podemos irnos al otro extremo de no saber que tuvieron éxito y que lograron el éxito y que lograron alcanzar ciertas cosas a pesar de las dificultades que han vivido. Todo el mundo, ¿claro conmigo?

Teniendo esas dos aclaraciones, hablemos un poquito de Oprah Winfrey, pero como ella hay muchos otros más. Esta mujer, en el día de hoy, se dice que vale alrededor de 2.5 billones de dólares. Ese es su net worth. Y ella cuenta en su historia, a través de los tiempos, de cómo ella fue maltratada, abusada. Esta joven quedó embarazada a la edad de 14 años. Tuvo su bebé y lo perdió automáticamente. Fue abusada por varias personas, entre ellas por su mamá, por su abuela. La historia que ella cuenta ahí: un día ella fue a buscar agua al pozo, su abuela la vio y dice que ella metió la mano en el agua del cántaro y por esa razón, eh, su abuela tomó un palito, un palo, y le dio una golpiza. Las heridas fueron tan grandes que no se cicatrizaron y, al otro día, cuando iban para la iglesia, se puso el traje y manchó de sangre el traje con el que iba a la iglesia. Y, como eso, hay un montón de otras historias que ella cuenta. Termina el pedacito de las entrevistas que yo te acabo de mostrar, ella diciendo lo que le llama a ella como sabiduría postraumática. Ella dice que hay sabiduría después de los traumas, que se puede aprovechar lo que te ocurrió, lo que te sucedió, para prosperar y para avanzar y para aprender de esas tragedias. Como ella, hay un montón de otras personas en el mundo que han logrado superar la aflicción, el maltrato, la amargura, el dolor y que no han permitido que las circunstancias negativas de la vida les detengan en alcanzar lo que es avance, progreso. Y, oiga bien, es verdad que existe sabiduría después de los traumas, puede existir sabiduría después de la aflicción, puede existir aprendizaje después de todos los problemas que tú has tenido en tu vida. Pero, para ti y para mí, como cristiano, hay algo más poderoso que la sabiduría y es la promesa de Dios, que ha dicho que, a pesar de tu aflicción, a pesar de tu problema, a pesar de tu pasado, a pesar de tus dificultades, a pesar de tus traumas, a pesar de todas las heridas que has tenido, hay una promesa de Dios que dice que tú eres destinatario y que tú eres capaz de prosperar y de aprovechar tu vida de manera tal que nada te pueda detener. Y hay una promesa que dice que, a pesar de la aflicción, Dios te puede levantar, Dios te puede prosperar. Y yo vengo hoy en fe a romper todo ciclo de trauma en tu mente, de aflicción de tu pasado, para que puedas avanzar en tu vida. Que sí tenemos que aprender de los traumas, seguro que sí, pero más que aprender tenemos que saber que hay una promesa que dice que, a pesar de tus problemas, tú estás destinado a prosperar, tú estás destinado a avanzar. Y por eso es que tú no te puedes, por eso es que tú no te puedes quitar, por eso es que tú tienes que creer la promesa de Dios para tu vida.

Es bien interesante cuando nosotros ponemos esto en perspectiva. En el día de hoy, en los días pasados, hemos estado hablando acerca del tema: yo creo en prosperidad. Es una idea importante que tú comiences a cambiar en tus pensamientos y en tu corazón lo que es el verdadero deseo de Dios para ti. Lamentablemente, a través de los tiempos, ha habido una gran crítica aún a esta misma expresión, que ha hecho que los creyentes, en muchas ocasiones, se limiten en poder avanzar y seguir hacia adelante. Hace dos domingos atrás, te explicaba dos cosas, nada más, que quiero mencionar y repasar en el día de hoy. Número uno: te explicaba que no existe una fórmula para que todo el mundo prospere. Dios trabaja con nosotros de manera independiente, de manera individual, de manera personal. Es bien interesante porque, cuando nosotros miramos la Biblia, hace dos domingos atrás, comparamos la vida de tres ricos. Tres ricos que fueron donde Jesús con la misma pregunta. Tres ricos que tenían una misma necesidad. Y es interesante que estos ricos buscaran a Jesús por la misma necesidad, lo que me llevó a mí a decir algo que yo sé que a algunos les causó controversia. Estos tres ricos, que te los voy a mencionar ahora, fueron donde Jesús buscando salvación y vida eterna