El corazón circuncidado
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 El corazón circuncidado

No basta con una marca física ni con cambios aparentes de personalidad, debemos procurar que nuestro corazón sea marcado, que sea un espacio limpio y abierto para el Señor.


Nuestro compromiso al tener un pacto con Dios es cambiar, cambiar completamente, no solo con palabras, sino también con actos. Cada parte de nuestro ser debe ser un testimonio vivo de la transformación. No se trata solo de una marca, también se trata de vivir en coherencia con ella.

Hoy, lo primero que nosotros tenemos que procurar es la circuncisión de nuestro corazón. ¿Qué hay en nuestro corazón? ¿Qué hay en nuestro interior que necesita ser sacrificado?

Hace unos días recordaba una experiencia que tuve hace poco. Estuve en un lugar con un par de personas, y uno piensa que ya está sano, pero cinco días después estoy soñando con esa situación. Literalmente, una mañana me levanté y le dije a mi esposa: “¿Tú sabes lo que soñé anoche?” Yo mismo soy mi Sigmund Freud; yo mismo interpreto mis sueños, yo mismo me doy cuenta de lo loco que estoy.

Le dije: “Mira lo que soñé, mira lo que pasó, ¿te acuerdas de lo que sucedió el otro día?” Y yo pensaba que eso ya estaba sano. Le dije a mi esposa: “¿Te acuerdas cuando nos pasó eso los otros días? Dime, ¿me comporté como un cristiano? ¿Me mantuve?” Porque años atrás, aun siendo pastor, hubiera actuado totalmente diferente.

Así que yo mismo me doy un golpe en el pecho y, al mismo tiempo, me sobo. Por lo menos puedo decir que he madurado. Después de 30 años como pastor, oye, me estoy comportando mejor, porque antes le hubiera arruinado el momento a mi esposa y a todos los que estaban a mi alrededor. Antes, probablemente, se me habría escapado cualquier cosa. Pero todavía hay algo dentro.

Si lo soñé, si el recuerdo todavía está ahí, ¿sabes lo que dice eso? Que todavía hay algo en mi corazón que tengo que llevar al cuchillo y decirle: “Señor, esto soy yo mismo. Déjame limpiar el corazón, déjame hacer el arreglo que tengo que hacer, déjame sacar esto de aquí. Señor, lo entrego”.

Porque si eso sigue ahí, hermano, se convierte en algo sangriento, algo que no le conviene a nadie. Y a lo mejor usted no lo ve, pero en mi interior yo lo sé, y Dios lo ve. Puedo venir aquí a aparentar cualquier cosa, pero la realidad es que delante de Dios no puedo engañarlo, tampoco a usted.

Podemos tratar de exigir a la gente cosas externas. Yo creo que todos nosotros, de alguna manera, tenemos que demostrar con nuestros actos, nuestras acciones y nuestra vida que realmente hemos creído. Pero lo más importante en esta noche, para todos los que estamos en este lugar, es la circuncisión del corazón. Es esa entrega total donde le permito a Dios realmente comenzar a vivir en mí y que sea un placer vivir para Él.

¿Qué es un corazón circuncidado? ¿Qué significa un corazón circuncidado? Me gusta como lo dice Tim Keller.

En nuestra vida hay dos cosas: nuestros placeres y nuestra obediencia, nuestra disciplina. Todos nosotros tenemos los dos “angelitos”, para usar palabras conocidas. No existen los angelitos esos, ¿verdad? Pero usted tiene el “angelito” que lo invita al placer y el que lo invita a hacer las cosas correctas. Eso lo tenemos todos. Esas dos cosas están ahí, pero cuando un corazón se circuncida, estas dos cosas se unen.

¿Cómo se unen? Mañana lo descubriremos…

3 Comments
  • Oswaldo Monier
    Posted at 15:30h, 30 January Reply

    Me CIRCUNCINDO EL CORAZÓN PARA SERVIRTE MÁS PURO Y LIMPIO ANTE TÚ PRESENCIA AMADO PADRE CELESTIAL
    AMÉN 🙏 LO

  • SILVIA H. GÓMEZ
    Posted at 14:54h, 05 February Reply

    Amén. Bendiciones

  • Marttha
    Posted at 01:34h, 07 February Reply

    Amén Sr dame un nuevo corazón Pará obedecer tu palabra

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