30 Sep Esto es lo que dice la Palabra
Bautízame para que se cumpla toda justicia, para que se cumpla la palabra. Tú no quieres bautizarme y a lo mejor yo no me debería bautizar contigo, pero la Biblia dice que me tienes que bautizar. Así que méteme ahí, bautízame. Olvídate.
Siempre está la opción de escoger a dónde usted lo lleva, y nadie que envíe a un niño al templo sale perdiendo. La mamá que envió a su hijo con los panes y los peces a la cruzada de Jesús, cuando ese niño dio los panes y los peces, alimentó a más de 5,000 personas y llegó a casa con 12 canastas llenas. Ningún papá pierde en enviar y en traer un niño al templo, jamás en la vida, jamás.
Pero la sociedad en la que vivimos lo queremos llevar al deporte, lo queremos llevar a aquello, lo queremos llevar a lo otro, y lo último es la palabra porque necesitamos que se entretengan. A los 12 años, Jesús no se estaba entreteniendo; a los 12 años Jesús estaba preguntando lo que dice la Biblia, qué dice la palabra, qué dice la Biblia.
Pero, ¿por qué? Porque cuando él nació, él sabía que vino con un propósito, él necesitaba su identidad a través de la palabra de Dios porque si no, el mundo lo iba a definir. El mundo iba a definir que él no servía para nada porque nació en Nazaret, pero la Biblia decía que tenía que nacer allí, la Biblia decía que tenía que nacer en Belén. El mundo le iba a decir: “Naciste en una familia pobre, naciste en una familia que no tenía muchos recursos porque terminaste en una posada.” Sí, pero la Biblia decía que así tenía que ser. Así que si la Biblia decía que así tenía que ser, pues entonces no fue un error. Y desde los 12 años, Jesús comenzó a llenarse de quién él era por la Palabra, y lo vemos en todo su ministerio.
Cuando observamos la Palabra del Señor, nos damos cuenta una y otra vez cómo, en los momentos más cruciales de la vida de Jesús, en todos ellos él no predicó una parábola, él no predicó una revelación; él se remitió a lo que es la palabra. Por ejemplo, cuando fue a entrar a las aguas bautismales, Juan el Bautista, en el libro de Mateo capítulo 3, le dice: “Yo no soy digno de bautizarte, yo no te puedo bautizar.” Jesús dice: “Bautízame para que se cumpla toda justicia, para que se cumpla la Palabra. Tú no quieres bautizarme y a lo mejor yo no me debería bautizar contigo, pero la Biblia dice que me tienes que bautizar. Así que méteme ahí, bautízame. Olvídate.” Y Juan el Bautista, el profeta enviado, se tuvo que someter, no a sus deseos, sino a qué, a la Palabra. Cuando nosotros miramos más adelante, Jesús sale de allí y es tentado en el desierto por el enemigo, y el enemigo comienza a tentarlo en tres ocasiones.
Y la victoria de esa tentación él la tiene porque ante cada tentación Jesús declaraba una sola cosa: en Mateo 4, “Escrito está, escrito está, escrito está: no tan solo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca del Señor. No me vienes a tentar aquí. Escrito está: a solo el Señor tu Dios vas a adorar. Punto y se acabó.” ¿Sabes? Toda la palabra no se puso allí a cantar un corito. Él no se puso a hacer otra cosa, él no se puso allí a cantar un corito. No, no, no, no. “Estos demonios se van si yo canto y creo la atmósfera.” No, la Biblia dice: “Esto es lo que dice la palabra.” Hermano, ahí no había internet, eso era memorizado y no había tal cosa como verso bíblico, no decía: “En Mateo tal, en Salmos tal, en sitio tal.” Decía: “No, no, no, no, esto tenía que sabérselo de verdad.” Tercer punto importante es su primera predicación.
Su primera predicación, en el libro de Lucas capítulo 4, dice la Biblia que le dieron el rollo del profeta Isaías, y cuando le dan el rollo del profeta Isaías, dice la Biblia que hallando el lugar donde estaba escrito, si quiere decir que halló el lugar donde estaba escrito, quiere decir que lo buscó. Él empezó a abrir el rollo y empezó a leer: “Espérate, aquí es que está.” Y empezó a leerlo: “Ah, y cuando lo encontró, aquí está escrito donde dice: ‘El espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para darle buenas nuevas’.” Y, óigame bien, a todos ustedes hoy esta Escritura se ha cumplido delante de todos ustedes. Lo que dice aquí, mi vida completa está aquí, mi vida completa está aquí.
Podía darte muchas más, pero, por ejemplo, cuando el Señor fue a la crucifixión, cuando iba para la crucifixión, el libro de Juan capítulo 15 comienza a citar algunos salmos, dejándole saber que el mundo los odiaría, a sus discípulos diciéndoles: “Papito, eso está escrito, los va.” “Ah, ¿pero por qué vienen persecución? Está escrito, está escrito, está escrito.”
Cuando fue a ser arrestado, citó varios versos y comenzó a recordarle lo que decía la palabra del Señor, de las escrituras, y decía: “Esto tiene que pasar para que se cumpla lo que está escrito, me tienen que traicionar, así está escrito.”
Te pregunto yo: si tú sabes que toda tu vida está escrita, ¿hay alguna confusión?
Oswaldo Monier
Posted at 09:07h, 30 SeptemberMi Vida Está Escrita En Tú Libro AMADO PADRE CELESTIAL
AMÉN 🙏🙏🙏
Wiliam Antonio Chacon Vargas
Posted at 10:03h, 30 SeptemberAmén gracias por esta palabra
JESUS REY CRUZ BARRERA
Posted at 11:54h, 30 SeptemberBendecido día Pastor Otoniel y DIOS Bendiga su vida y
Gracias por compartirnos esas enseñanzas que son muy apropiadas para crecer en la FE y en lo espiritual
BENDICIONES
marttha
Posted at 23:19h, 02 OctoberAmén