Estar muerto al pecado
18815
post-template-default,single,single-post,postid-18815,single-format-standard,bridge-core-3.0.5,mec-theme-bridge,qi-blocks-1.3.1,qodef-gutenberg--no-touch,qodef-qi--no-touch,qi-addons-for-elementor-1.7.8,qode-page-transition-enabled,ajax_fade,page_not_loaded,,qode-title-hidden,qode_grid_1300,qode-theme-ver-29.1,qode-theme-bridge,wpb-js-composer js-comp-ver-6.9.0,vc_responsive,elementor-default,elementor-kit-14558

Estar muerto al pecado

La gracia de Dios no solo nos perdona, sino que también transforma nuestro corazón y mente, dándonos el poder para vivir una vida nueva y santa. Reconoce y acepta el perdón que Dios ofrece a través de Su gracia.

Descubre por medio de este video cómo vivir sin el peso del pecado.

La pregunta es por qué en tu mente tú mismo te martirizas si eres cristiano, si no eres cristiano, si eres salvo, si no eres salvo, si estás bien con Dios, si no estás bien con Dios, si Dios te ama o no te ama, si te quiere o no te quiere, si Él está contigo o no está contigo, y tú siempre estás buscando en tu propia mente una excusa por la cual no tener confianza, no tener seguridad. Tú tienes que saber que tienes que darte por muerto al pecado. Ya el pecado no te asedia, ya el pecado no es tu problema, el pecado no te limita, ya el pecado no te detiene. Él pagó el precio por ti en la cruz del Calvario. Por eso es que tú te puedes acercar confiadamente al trono de la gracia para hallar oportuno socorro y por eso es que cada mañana tú tienes que presentarte como que estás vivo para con Dios.

Dice Romanos capítulo 6, verso 11: “Considérate muerto al pecado y vivo para Dios”. Considérate muerto al pecado. Romanos capítulo 6, verso 11: “Considérate muerto al pecado y vivo para Dios”. ¿Cómo una persona en el día de hoy puede tener paz en su corazón? Cuando yo me considero muerto al pecado y vivo para Dios. ¿Qué es estar muerto al pecado? La palabra muerto en la Biblia no necesariamente habla de muerte física, sino que habla de separación, habla de estar alejado, habla de estar separado. ¿Te acuerdas cuando el joven, el hijo pródigo, qué dice la Biblia? Que cuando regresó a su casa, el papá dijo: “Este es mi hijo que estaba muerto y ahora…”. Porque para ellos muerto era estar separado, era estar alejado. El creyente que es salvo tiene que considerarse separado del pecado y vivo para Dios, separado del pecado. Ya el pecado no cuenta en mi vida. Eso no quiere decir que no voy a cometer errores, pero el pecado ya lo pagó por mí en la cruz del Calvario. Aquello que me iba a separar de Él, ya lo pagó por mí el precio de la cruz del Calvario. Yo lo que tengo que hacer es considerarme vivo para con Dios para vivir en esa seguridad y en esa certeza, y que mi mente sea libre cada mañana y yo pueda tener paz en mi corazón y en mis pensamientos.

Te doy un ejemplo que te va a explicar todo lo que te he dicho de forma más sencilla, o pienso yo. Al Señor Jesús le llevaron una mujer un día, se la tiraron a los pies que fue encontrada en el mismo acto del adulterio. La tiraron allí a los pies de Cristo y la Biblia dice que Jesús se dobló y comenzó a escribir en el suelo. Y cuando comenzó a escribir en el suelo, se puso de pie y le dijo a todos los que estaban allí: “El que esté libre de pecado, arroje la primera piedra”. ¿Cierto? ¿Y qué pasó? La Biblia nos dice que se fueron uno por uno, desde el más viejo hasta el más joven. Porque mientras más viejo eres, más pecados tienes encima. Así que desde el más viejo hasta el más joven se fueron, dice la Biblia. Tiene todos los detalles, se fueron. Jesús vuelve y se arrodilla delante de aquella mujer y cuando se arrodilla delante de aquella mujer, le dice esta expresión: “Mujer, ¿dónde están los que te acusan?”. Ella dijo: “No los veo”. Él le dijo: “Yo tampoco”. Le dijo: “Vete y no peques más”. ¿Dónde están los que te acusan? ¿Dónde están los que te acusan?

Yo te pregunto en el día de hoy, ¿tu inseguridad en tu vida no vendrá de que tú mismo te acusas? ¿De que tú mismo te exiges algo que realmente no te puedes exigir, que tienes que depender de la gracia de Dios? ¿Dónde están los que te acusan? Dime, ¿en este mundo quién te puede acusar? Todo el que te acusa está lleno de pecado. Es bien interesante porque todo el que señala está lleno de pecado y tú y yo a veces nos preocupamos por lo que la gente dice, por lo que otros hablan. Okay, logramos vencer lo que la gente dice, lo que otros hablan, entonces viene el acusador de nuestra mente. Porque la Biblia dice que Él ya cayó. La boca del enemigo, aquel que te acusaba delante de Él, no puede hablar. El enemigo no, óigame bien, el enemigo no tiene evidencia alguna en contra tuya. ¿Sabes por qué no tiene evidencia en contra tuya? Porque Dios la borró, la desapareció por completo. Así que cuando el enemigo va a hablar de ti, no hay evidencia para que él pueda hablar de ti ni acusarte absolutamente de nada, porque Él la borró toda, desapareció. Él te limpia más blanco que la nieve. Y es bien interesante, los que te acusan en este mundo no te pueden acusar porque están llenos de pecado. El enemigo no te puede acusar porque no tiene evidencia para acusarte de nada. Dios no te acusa. La pregunta es por qué tú te acusas a ti mismo.

La pregunta es por qué en tu mente tú mismo te martirizas, si eres cristiano, si no eres cristiano, si eres salvo, si no eres salvo, si estás bien con Dios, si no estás bien con Dios, si Dios te ama o no te ama, si te quiere o no te quiere, si Él está contigo o no está contigo. Y tú siempre estás buscando en tu propia mente una excusa por la cual no tener confianza, no tener seguridad. Y tú tienes que saber que tienes que darte por muerto al pecado. Ya el pecado no te asedia, ya el pecado no es tu problema, el pecado no te limita, ya el pecado no te detiene. Él pagó el precio por ti en la cruz del Calvario. Por eso es que tú te puedes acercar confiadamente al trono de la gracia para hallar oportuno socorro y por eso es que cada mañana tú tienes que presentarte como que estás vivo para con Dios. Óyeme bien, en el día de hoy tú tienes que presentarte a este mundo como que estás vivo, como que estás vivo para con Dios. Y si algo tenemos que hacer es callar la mente que nos acusa, los pensamientos que nos condenan. ¿De qué le hubiera servido a aquella mujer haber sido liberada de pecado aquel día y que su mente la siguiera acusando?

3 Comments
  • Oswaldo Monier
    Posted at 10:06h, 19 July Reply

    AMADO PADRE CELESTIAL, Haz Que Tú GRACIA DIVINA Transforme Mi Mente Y Mi Corazón Para Adorarte Y Servirte Por Siempre
    AMÉN 🙏🙏

  • Wiliam Antonio Chacon Vargas
    Posted at 12:45h, 19 July Reply

    Gracias por esta palabra muchas bendiciones

  • Marlyn Monet
    Posted at 15:20h, 19 July Reply

    Gloria a Dios. Reconozco que estoy muerta al pecado y estoy viva para con Dios🙌🏼 🙌🏼 Padre Amado bendice al Pastor y dale el mensaje que Tú Pueblo necesita🙌🏼🙌🏼

Post A Comment