08 May En busca de señales
Si tú eres real, haz esto por mí. Espérate, espérate… y todo lo que he hecho, te he mantenido con vida durante todo este tiempo. Jesús les dijo: ‘Ustedes no entienden. Yo soy el pan de vida. Yo soy el pan vivo que el Padre envió.’ Comprendan lo segundo que ocurrió en aquella ocasión: ellos comenzaron entonces a seguirlo por ese pan. Y es triste lo que te acabo de explicar. No tan solo quieren hacerme Rey, sino que comienzan a seguirme únicamente por eso. Y cuando Jesús les dice: ‘Hey, muchachos, se acabó el pan. Este se acabó. Este fue un milagro de una vez, ya se terminó.’ Entonces ahora tornaron sus espaldas y se fueron.
La gente piensa que Dios va a proveer tus necesidades siempre de la misma manera. ‘Señor,’ le dijo a Josué, ‘de la misma manera que estuve con Moisés, estaré contigo.’ Y cuando Josué puso un pie en la tierra prometida, lo primero que se fue fue el maná. Tú te imaginas levantarte por la noche y oír la voz de Dios diciéndote: ‘De la misma forma que estuve con Moisés, estaré contigo.’ Y por 40 años él vio cómo Dios proveía maná todos los días. Pongo un pie en la tierra prometida y el maná desaparece. Y por supuesto, en la tierra prometida el maná desaparece porque el pan que se come en la tierra prometida es producido por la mano de Dios a través de la vida del hombre. Y la tierra prometida se conquista a través de la espada, a través de luchar, a través de atreverte a creerle a Dios por las cosas más grandes y ver el respaldo de Dios.
Así que tú y yo no nos podemos quejar cuando de repente un día Dios dice: ‘Esta manera de hacer las cosas se terminó.’ Lo tercero que ocurrió es que cuando eso pasa y ellos comienzan a hablar con Jesús, entonces ellos le dicen a Jesús: ‘¿Qué tenemos que hacer? ¿Qué tengo que hacer? ¿Qué tengo que hacer?’ Y muchas veces, sin darnos cuenta, en nuestra vida siempre estamos en el énfasis de todo lo que tenemos que hacer. Y definitivamente tiene que haber esfuerzo en nuestra vida, definitivamente tenemos que hacer, pero la vida del cristiano no se basa en lo que hace, se basa en lo que cree. Y por eso es que Jesús les dice: ‘Si quieres comer este pan, no se trata de lo que puedes hacer, se trata de que tienes que creer en mí.’ Lo cual, entonces, los lleva a ellos a decir esta frase que para mí es la más vergonzosa: entonces ellos le dicen: ‘Haznos otra señal para poder creerte.’ Lo acabamos de leer: ‘Haznos otra señal.’ O sea, todo lo que he hecho no es suficiente, todo lo que he hecho no es suficiente… Ayúdame en el piano, todo lo que he hecho no es suficiente hasta el día de hoy para que creas en mí.
¿Sabes? Dime, ¿cómo te sentirías si alguien que tú has amado te dijera eso? ‘Dame una prueba de amor otra vez.’ O sea, todo lo que he hecho no te prueba mi amor. Entonces, ¿eres insaciable? Y esta gente le dijo a Jesús: ‘Danos otra señal.’ Y a mí me entristece la gente que deja de creer porque ya no ven señales, y no se dan cuenta de que no ven las mismas señales porque las señales eran para llevarlos a conocer a Él. Y vemos un montón de gente en la iglesia hoy, y en las redes sociales, gente que busca señales, busca señales, busca señales… Y nuestra iglesia no es la más excitante, de acuerdo a mucha gente en las redes, porque la gente quiere que tú sientas que se te paren “La gente quiere aquí que nos revolquemos, que demos saltos, brincos, gritos, aquello y lo otro, y hay tiempo para todo. Pero, ¿sabes? No tengo que hacer todo eso para que vengas y oigas la palabra del Señor. Cuando la vida debe ser tan simple, tan sencilla… O sea, ¿para que tus hijos vayan a tu casa tienes que tener siempre una fiesta, una celebración, tienes que tener 500 cosas? Cuando llegar a casa debe ser la mayor satisfacción, llegar ahí a comer un arroz blanco con unas habichuelas coloradas debe ser más que suficiente para que tú llegues allí.
Lo mismo nos pasa con Dios. ¿Sabrá Dios cuántos aquí hoy están pidiéndole otra señal? ‘Si tú me amas, si tú me amas…’ Si Él te dio la señal más grande hace 2000 años atrás, entregó a su hijo para que muriera por ti en la cruz del Calvario. Punto. Tú no necesitas más nada.
‘Si tú eres real, haz esto por mí. Espérate, espérate…’ Y todo lo que he hecho, te he mantenido con vida durante todo este tiempo. Jesús les dijo: ‘Ustedes no entienden. Yo soy el pan de vida. Yo soy el pan vivo que el Padre envió.’ Compréndelo
SADELA JOSE LATUFF PINEDA
Posted at 06:43h, 08 MayBUEN MENSAJE MI PASTOR FONT
Jhon Mario
Posted at 07:17h, 08 MayAmén, Gloria a Dios
Oswaldo Monier
Posted at 08:59h, 08 MayToda la Gloria y Toda la Honra para Tí AMADO PADRE CELESTIAL, AMADO SEÑOR JESUCRISTO y PRECIOSO ESPÍRITU SANTO
AMÉN 🙏🙏😘🙏🙏
DENIS DIAS
Posted at 09:33h, 08 Mayque gran exhortacion, somos muy dados a pedir y pedir,cuando tenemos lo mas valioso el sacrificio que nos dio Salvacion y vida eterna, gracias DIOS ese ha sido la mas grande señal de que me amas!!
Wiliam Antonio Chacón Vargas
Posted at 20:03h, 08 MayAmén y gracias a Dios sigue cuidando mi vida y familia
Marttha
Posted at 16:21h, 16 MayAleluya Gloria a Dios