29 Nov El Poder
Por último, para terminar en el día de hoy, el quinto punto de todo el mensaje, el tercer concepto que te dije, el tercer concepto que quiero que entiendas del Espíritu Santo, es el concepto del poder. El concepto del poder: persona, presencia y poder.
Poder. La palabra del Señor dice en el libro de Primera de Corintios, capítulo 12, el verso 7:
Pero a cada uno le es dada la manifestación del Espíritu para provecho. Porque a éste es dada por el Espíritu palabra de sabiduría; a otro, palabra de ciencia según el mismo Espíritu; a otro, fe por el mismo Espíritu; y a otros, dones de sanidades por el mismo Espíritu. A otro, el hacer milagros; a otro, profecía; a otro, discernimiento de espíritus; a otro, diversos géneros de lenguas; y a otro, interpretación de lenguas. Pero todas estas cosas las hace uno y el mismo Espíritu, repartiendo a cada uno en particular como él quiere.
Gálatas, capítulo 3, el verso 5:
Aquel, pues, que os suministra el Espíritu, y hace maravillas entre vosotros, ¿lo hace por las obras de la ley, o por el oír con fe?
¿Lo hace por los mandamientos, o lo hace por la fe que tú tienes? Pero mira lo que hace el Espíritu: hace maravillas. Así que definitivamente, el Espíritu Santo se manifiesta con poder. Se manifiesta con poder a través de los dones. Te acabo de leer un listado de dones: el don de profecía, el don de sabiduría. Ahí está el poder de Dios manifiesto. Y definitivamente, parte de nuestra experiencia con el Espíritu Santo es la manifestación de este poder en nuestras vidas. El poder para hacer maravillas. El poder para que tu misma vida sea una maravilla para el mundo. Así que definitivamente, tenemos que aspirar a tener una relación con el Espíritu Santo, y saber que la consecuencia de la relación con la persona, con el Espíritu Santo, es acceso al poder que él nos puede dar.
Pero una vez más, no creas que solo poder. Porque si crees que solo poder, solo lo usas. Y si lo usas, es la mejor manera para dañar una relación. Todo el que se siente usado, pierde una relación. Él es una persona que me da acceso al poder. Me da acceso al poder de ciencia. Me da acceso al poder de sabiduría. Me da acceso al poder de los milagros. Seguro que sí. A través del poder del Espíritu Santo, nosotros podemos hacer maravillas y alcanzar muchísimas cosas en nuestra vida. Y todos los que estamos aquí debemos aspirar a ese poder. Todos los que estamos en este lugar debemos aspirar un día a tener tal relación con el Espíritu Santo, donde podamos ver esas cosas manifiestas en nosotros. Donde el don de sabiduría, el don de ciencia, de profecía, se levante en tu vida, te dirija, te guíe. Donde tú puedas poner las manos sobre los enfermos y la gente sea sanada. Donde tú hagas una oración, donde quiera que tú vayas, y puedas ver un milagro ocurrir en tu vida y en la vida de otros. Definitivamente, el poder del Espíritu Santo está ahí, disponible para nosotros.
Pero, pero, el poder del Espíritu Santo es más que eso. El poder del Espíritu Santo es más que eso. Y aquí es donde yo veo abusos espirituales en la iglesia. Aquí es donde veo personas que han tenido el placer y el honor de ser usados por Dios, quizás en el área, por ejemplo, de hacer milagros. Y hacen sentir a todos los pastores, y a otros ministros, y a otros líderes en la iglesia, que si ellos no hacen milagros, el Espíritu no está con ellos. Aquí es donde yo veo que hay gente que abusa espiritualmente y manipula a gente en la iglesia, porque le hacen creer a cristianos que si ellos no hablan en lenguas, no están llenos del Espíritu Santo. Cuando el mismo apóstol Pablo, en este listado, dice: “¿Sanan todos? No. ¿Hablan todos lenguas? No”. Él hace la aclaración: el Espíritu Santo se manifiesta en cada uno según la medida que es necesario, que él quiere, y que él sabe.
Todos podemos aspirar, y sí que todos debemos tener acceso, y que tenemos acceso a eso, sí. Y debes aspirar por la señal del poder del Espíritu Santo en nuestra vida. Pero va más allá que eso. En el libro de Segunda de Corintios, capítulo 12, el verso 9, dice de esta manera:
Y me ha dicho: Bástate mi gracia, porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo. Por lo cual, por amor a Cristo me gozo en las debilidades, en afrentas, en necesidades, en persecuciones, en angustias; porque cuando soy débil, entonces soy fuerte.
Este es Pablo hablando, después de orar tres veces. Dice que no todas sus oraciones serán contestadas como él quiere, de forma inmediata o como él quiere. Pero en medio de todo problema, el Espíritu Santo le va a dar la fortaleza, le va a dar la fuerza, le va a dar la capacidad de continuar, de seguir hacia adelante. Entonces, yo tengo que hacer como Pablo. Ora una vez, ora dos veces, ora tres veces. Y después de orar cierto tiempo por algo y que no se dé, tú dices: “Bueno, pues esto tengo que soportarlo. Espíritu Santo, ayúdame a soportarlo, porque voy a caminar contigo, voy a hacer lo que tengo que hacer, y tú me das la fortaleza hasta llegar al otro lado, hasta terminar con mi tarea, hasta completar la obra que Dios ha puesto en mi vida”.
sadela jose latuff pineda
Posted at 08:22h, 29 November29 11 23 LATUFF SADELA SIGUIENDOLO POR TODAS LAS REDES,,,,,,,E MAIL,,,,,FACEBOOK,,,,,WHATSAPP,,,,,,YOU TUBE,,,,,HE INSTAGRAN,,,,,,DESDE VENEZUELA,,,,,,SALUDOS AL MINISTRO MIGUEL Y A LA HERMANA SHARLENNE……
Alicia Farías González
Posted at 08:53h, 29 NovemberAmén, amén… Bendecido Pastor Otoniel, gracias a Dios por sus vidas..
Oswaldo Monier
Posted at 09:31h, 29 NovemberGracias Precioso Espíritu Santo por llenarme de Poder, Discernimiento y Sabiduría para seguir adelante con tus Enseñanzas y Misericordias
AMÉN 🙏🙏🙏
Lourdes Anca
Posted at 16:55h, 29 NovemberEs un gozo, leer esas palabras de sabiduría. Gracias