04 Jul Las luchas con la serpiente

Hoy yo quiero que tú entiendas que el Dios al que tú le sirves no tan solo te quiere proteger de los enemigos externos, sino que te quiere proteger de los enemigos internos y que Él es el que te ha dado la autoridad para tú callar la serpiente que se mete en tu cabeza, la serpiente que se mete en tu corazón y en tus pensamientos. 

Entiende que tenemos que levantar cercos de protección, tenemos que cuidar el corazón de todos los que estamos aquí, tú tienes que cuidar el tuyo y tienes que saber quién te habla, quién te bendice y quién te dice qué eres tú. 

Tienes que sentarte con tus hijos, con tu esposa, con tus familiares y hablarle al corazón cuidar el corazón para que la serpiente no siga hablando y no los engañe porque el pensamiento es sutil. Por eso nos toca no tan solo cuidarnos de los enemigos de afuera sino de los enemigos de adentro que se meten en nuestros pensamientos. 

Y nuestro Señor Jesucristo vivió eso, dice la Palabra del Señor que tuvo que ir al desierto y allí fue tentado después de 40 días le dio hambre y llegó la primera tentación y allí venció al enemigo. Después de tres tentaciones venció al enemigo.  

Usted tiene que ver que Jesús dice nadie entra en la casa del hombre fuerte si primero no lo ata y entonces entra y le roba todas las cosas, esa referencia es lo que Cristo hizo en el desierto él ató al enemigo por tres años y medio él no pudo hacer nada, donde quiera que Jesús iba a los demonios tenían que salir y la gente era sanada y liberada. 

El enemigo no pudo nunca porque había un cerco de protección que no permitía que hiciera nada pero un día entró Jesús en un huerto y en todo huerto hay una serpiente y estando allí la serpiente le habla, la serpiente le dice no tienes que pasar por esto tiene que haber algo más fácil y Jesús dice en esa ocasión Padre si es posible pasa de mí y el pensamiento de la serpiente fue si Dios fuera tan bueno y fuera tu papá no tendrías que morir. 

Pero Jesús reaccionó rápido hágase tu voluntad y cayó la serpiente inmediatamente y yo quiero que tú entiendas que aunque hagamos cercas para protegernos la serpiente todavía se mete y la serpiente está en nuestra carne, en nuestro corazón, en nuestros pensamientos y que nos habla para deprimirte y para sacarte del huerto. 

Y tu tienes que accionar,  Padre Celestial y que tienes que saber que Él  te va a hablar en tu interior y Él va a poner límites y te va a decir lo que puedes o no puedes hacer, lo que tienes que soportar o lo que no tienes que soportar que a veces te va a impedir que hagas cosas. 

Cristo que caminó aquí en la tierra le aplastó la cabeza al enemigo para darte a ti y a mí la victoria.