20 Mar ¿Los símbolos pueden controlar una nación?

Se dice que el símbolo más influyente en la historia de la humanidad es el símbolo nazi, que aún hoy día provoca emociones de todo tipo, el mundo sabe eso y lo utiliza para manipularnos.

A través de los tiempos las grandes empresas han logrado crear que sus automóviles o su ropa se convierta en un símbolo.

¿Cuál es el símbolo o la señal por la que nosotros tenemos que vivir? Es bien interesante que la nación entienda que necesita un símbolo que mueva a la gente y queramos o no, todos nosotros somos movidos por símbolos y por pequeñas cosas que marcan una reacción en nosotros.

La cruz así como está formada que parece algo tan sencillo y tan simple, es increíble como todavía el día de hoy evoque tanta emoción en el mundo entero. 

El símbolo del dinero de alguna manera u otra evoca en nosotros ciertos pensamientos y emociones, el mundo sabe eso y lo utiliza para manipularnos. 

Por ejemplo, la marca Volvo en la mente de mucha gente es un símbolo de seguridad, si tú quieres un carro seguro para tu familia compra un carro Volvo.  En nuestra mente un Toyota nunca se daña ¿cierto? Así que tú compras el Toyota porque nunca se daña. Ese es el símbolo, y para un estatus de riqueza un Mercedes. Y eso mueve a la gente. 

Hace muchos años el símbolo principal del reggaetón y del rap eran las cadenas,  aunque la mayoría sabíamos que todas las tenían alquiladas o prestadas, pero era la manera en que tú te mostrabas que tenías. 

Hoy ese no es el símbolo que mueve a la sociedad, hoy el símbolo es el de la marca de carro más cara y esos símbolos evocan en nuestra mente ciertas pasiones. Los cristianos somos susceptibles a esas cosas también, aunque nosotros tenemos que saber cuál es el símbolo o la señal por la que nosotros tenemos que vivir. 

¿Cuál es la señal o el símbolo que debe mover nuestro espíritu y mover nuestro ser? El mismo dinero nos promete muchas cosas como seguridad, tener libertad y tener tantas cosas que uno piensa que puede tener.  Pero tú y yo no nos podemos dejar llevar por los mismos símbolos que el mundo se deja llevar y no debemos ser movidos por las mismas cosas que el mundo se mueve.

Una de las cosas que ha movido por mucho tiempo al igual que el cristianismo, ha sido el famoso símbolo de la marca del 666. ¿Quién es el que va a poner la marca del Anticristo? Hace mucho tiempo atrás fue Gorbachov y la gente ha reaccionado a los símbolos, pueden ser positivos o negativos. 

A nuestra iglesia nos han puesto marcas para tratar de evitar que la gente llegue a este lugar. Por ejemplo, a esta iglesia le han marcado como la iglesia de la prosperidad o la iglesia de los ricos, lo dicen como si fuera algo negativo y me critican como yo tomo las ofrendas, pero ¿En todas las iglesias que critican las ofrendas y los diezmos? No, pero en todas las iglesias en Puerto Rico piden diezmos a una iglesia católica, pide limosnas, la diferencia que nosotros no pedimos limosna, nosotros pedimos ofrendas y es la diferencia que con la conciencia que nosotros lo hacemos diferente con la que Dios lo hace.

Es interesante, porque ellos predican la verdadera prosperidad, pero nosotros somos los predicadores del Evangelio o la teología de la prosperidad entonces comienzan a marcar la vida de encerrar la iglesia simplemente para provocar ciertas emociones. 

Hemos sido acusados de ser la iglesia de prosperidad, de ser la iglesia de los ricos y de muchas otras cosas hemos sido acusados. Pero le digo, yo tengo orgullo en ser la iglesia de prosperidad, la iglesia de gente que quiere avanzar y estoy orgulloso de que esta sea la iglesia de la Palabra si usted quiere oír una buena Palabra aquí la va a encontrar. 

Esto no quiere decir que somos perfectos, lo que quiere decir es que en Puerto Rico está la multiforme gracia de Dios, Dios tiene gente de cada estilo de cada forma y si todo fuéramos iguales uno de los dos está de más, así que yo prefiero ser lo que Dios quiere que yo sea para aquellos que Dios quiere traer aquí. 

Lo que no entienden, es que todos podamos vivir felices y contentos, pero nunca nos podemos avergonzar de lo que nos ha dado resultado a nuestra vida. Aunque el mundo nos ponga un sello simplemente para podernos marcar de forma negativa y provocar reacciones en la vida de los demás.