21 Nov Rescate y Corona

“Bendice, alma mía, a Jehová, Y bendiga todo mi ser su santo nombre. ² Bendice, alma mía, a Jehová, Y no olvides ninguno de sus beneficios. ³ El es quien perdona todas tus iniquidades, El que sana todas tus dolencias; ⁴ El que rescata del hoyo tu vida, El que te corona de favores y misericordias; ⁵ El que sacia de bien tu boca De modo que te rejuvenezcas como el águila.”  Salmos 103:1-5 

El salmista hace un esfuerzo consciente por recordar lo que Dios ha hecho por él, le da una orden a su mente de que no olvide.  En tus momentos difíciles, siéntate y haz un listado; te vas a dar cuenta cuántas veces Dios te ha rescatado.  Pudiste haber estado en una situación peor, y Dios te rescató, llegó a tiempo a salvarte. 

A veces, le echamos la culpa a Dios, nos preguntamos por qué no estuvo ahí, cuando a veces, lo que vivimos son consecuencias de nuestras malas decisiones, y lo que estamos viendo es cómo Dios está poniendo su mano para no permitir que las cosas sean peor, que no lleguen a un nivel mayor, sino que Dios es quien mete la mano y nos saca del hoyo en el que hemos caído.  Quizás tú, hoy, llevas ya tiempo en el hoyo de los problemas financieros, de discusiones que no cesan de engrandecerse, en el hoyo de la depresión.  Quizás has buscado ayuda del psicólogo, de algún familiar; has puesto tu esperanza en cosas naturales, terrenales, cuando en realidad el único que puede rescatar de un hoyo tu vida, es Dios.  Esa palabra recatar tiene que ver con pagar el precio.  Cuando tú caes en situaciones difíciles, por errores, por dificultades, Dios paga el precio por ti, Él te rescata, Él paga el precio por ti. 

Dice también el salmista que Dios te corona de favores y misericordias.  En algunas versiones en inglés, dice “loving kindness and tender mercies” o “bondad amorosa y misericordias tiernas”.  Dios demuestra su amor y su  misericordia hacia tu vida, a pesar de tus dificultades.  La escritura continúa diciendo que Dios sacia de bien tu boca, de modo que te rejuvenezcas como el águila.  Dios cambia tu manera de hablar y tu vida, de manera que comiences a renovar todo tu ser. 

En medio de situaciones, una de las cosas más negativas que puede pasar es que comiences a declarar confesiones negativas.  Esto lo que trae es carga; pero Dios te bendice de manera tal que ya tu boca no tendrá que hablar de lo negativo que sucedió, sino que habrá bien para tu boca.  De ti van a salir frases de agradecimiento, testimonios, favor y gracia, porque de eso estarás lleno.  Eso es lo que el Señor hace en tu vida.  Y es triste que la gente no se detenga a pensar en estas cosas, que no comprendan lo importante de ver a Dios en sus vidas y en todo lo que Él ha hecho por ellos. 

Oro por ti, si hoy necesitas un rescate de Dios en tu vida.  Creemos a Dios contigo por un tiempo de transformación.  Quizás, hoy, te preguntas qué beneficio hay en servirle al Señor; y es que te has olvidado de todas las cosas que dice el salmista que tienes que recordar.  Has olvidado que Dios perdona todas tus iniquidades, que Él sana todas tus dolencias, rescata del hoyo tu vida, te corona de favores y misericordias, sacia de bien tu boca de modo que te rejuvenezcas como el águila.  Y el verso siguiente dice que es Dios quien hace justicia.  Hoy, creemos contigo a Dios por tu milagro.  Declaramos que Dios hoy rescata del hoyo tu vida.